NO TIENE POR QUÉ RESIGNARSE A PERDER audio


Cuando perdemos la perspectiva, perdemos muchas otras cosas importantes con ella: se nos va la capacidad de creer que  la vida puede ser otra cosa que un agujero negro en el que caer. 

A veces, aprendemos a perder, la resignación se torna un hábito imposible de sacudirse.


Necesitamos tomar la responsabilidad de responder de esta visión catastrófica para redefinir nuestra situación.

Desaprender a perder es posible.