LAS COSAS SON LO QUE SON Y NADA MÁS
Uno puede intentarlo, a pesar de que todos los factores se revelan en su contra, no porque el orden del Universo se haya configurado para ponérselo difícil, sino porque a veces la vida se manifiesta en toda su crudeza. Observamos la anécdota que se convierte en generalidad a través de compartirla en las redes sociales. Por ejemplo, la gente comparte un vídeo grabado de algo que resulta una excepción, como el de un león hambriento que perdona la vida a una pequeña gacela. Es un accidente que marca un paso que destacamos. La animalidad es más bien fiera pero nos gusta ver y quedarnos con la excepción. La lucha por la vida, es eso una lucha. Los leones comen gacelas y es así, no es ni bueno ni malo. Son las reglas. Nuestra imaginación, el pensar un poquito más, a menudo altera la historia que nos contamos, la deforma y llegamos a creer lo que nos gustaría que fuera. Sin embargo, las cosas son lo que son, y nada más. Usted quizá está intentando salir adelante. No